Hola Estimadas Co-construidas: Primero que nada quiero agradecerles y mucho por lo que ha sido para mí (y por lejos) la mejor experiencia en este tipo de encuentros entre colegas. He asistido a unos cuantos aquí en el país (nunca afuera) y no recuerdo un clima similar y esa permanente sensación de estar hablando de cosas importantes, y entre interlocutores más que válidos. Generalmente este tipo de jornadas sirven sólo para que cada autista participante (y me incluyo, obviamente) justifique una casilla más en el bendito Sigeva (antes... por un papelito). Cuando digo co-legas me refiero a todos, ciertamente; la presencia de Compatriotas de Pueblos Originarios y de los Vecinos Sin Techo fue lo que verdaderamente colmó de sentido a todo, resignificando profundamente el verdadero rol que debe jugar la universidad en todo este sistema. Sólo lamento profundamente no haber asistido el día jueves; si bien era necesario estar presente en mi facultad -y resultó ser una actividad más que fructífera- no se compara con lo vivido luego con todos ustedes. Millón de gracias otra vez. Un abrazo.
Hola Estimadas Co-construidas:
ResponderEliminarPrimero que nada quiero agradecerles y mucho por lo que ha sido para mí (y por lejos) la mejor experiencia en este tipo de encuentros entre colegas. He asistido a unos cuantos aquí en el país (nunca afuera) y no recuerdo un clima similar y esa permanente sensación de estar hablando de cosas importantes, y entre interlocutores más que válidos. Generalmente este tipo de jornadas sirven sólo para que cada autista participante (y me incluyo, obviamente) justifique una casilla más en el bendito Sigeva (antes... por un papelito). Cuando digo co-legas me refiero a todos, ciertamente; la presencia de Compatriotas de Pueblos Originarios y de los Vecinos Sin Techo fue lo que verdaderamente colmó de sentido a todo, resignificando profundamente el verdadero rol que debe jugar la universidad en todo este sistema. Sólo lamento profundamente no haber asistido el día jueves; si bien era necesario estar presente en mi facultad -y resultó ser una actividad más que fructífera- no se compara con lo vivido luego con todos ustedes.
Millón de gracias otra vez. Un abrazo.
José María Aguirre